Neoyorquino de nacimiento, pero de orígenes irlandeses, James, que se trasladaría a Europa para desarrollar una culta educación iniciada en Estados Unidos, terminaría nacionalizándose inglés. Cabalga entre los siglos XIX y XX, una época de grandes cambios económicos, sociales y culturales que desembocarían en momentos dramáticos con las guerras que asolarían Europa y que se llevaría por delante el mundo conocido por el autor.
Considerado uno de los grandes maestros estadounidenses de la ficción moderna, especialmente en relato breve, en sus obras refleja su propia tensión interior entrando a veces en conflicto cuando enfrenta la cultura europea y la norteamericana, ambas bien conocidas por él. Lo podréis comprobar con esta breve novela, al igual que en Pandora, de la que ya os había escrito anteriormente.
En la ciudad turística de Vevey, en Suiza, a finales del siglo XIX Daisy Miller, una hermosa y rica joven americana, se encuentra haciendo un tour europeo junto a su madre y su hermano pequeño. A la misma ciudad viaja el joven Winterbourne, un compatriota de la alta sociedad neoyorquina que en calidad de estudiante reside en Ginebra desde hace algún tiempo. Ahora se encuentra en Vevey visitando a su tía que pasa la temporada de invierno en un hotel de esa localidad. El encuentro fortuito de los dos jóvenes en unos jardines les lleva a entablar una conversación que deja perplejo a Winterbourne por lo inusual de estar hablando a solas y en público con una mujer a la que no parece importarle lo más mínimo las formas sociales establecidas mostrando una naturalidad e inocente desenfado que no sabe cómo calificar. Más tarde volverán a encontrarse en Roma; pero en esta ciudad el modo desenfadado y de libertad de costumbres con los que la joven trata a los caballeros no es aceptado por la comunidad americana allí establecida. Winterbourne, desconcertado y sin saber dar razón de ese comportamiento, se verá en la obligación de advertir a Daisy de su errónea manera de conducirse.
En la ciudad turística de Vevey, en Suiza, a finales del siglo XIX Daisy Miller, una hermosa y rica joven americana, se encuentra haciendo un tour europeo junto a su madre y su hermano pequeño. A la misma ciudad viaja el joven Winterbourne, un compatriota de la alta sociedad neoyorquina que en calidad de estudiante reside en Ginebra desde hace algún tiempo. Ahora se encuentra en Vevey visitando a su tía que pasa la temporada de invierno en un hotel de esa localidad. El encuentro fortuito de los dos jóvenes en unos jardines les lleva a entablar una conversación que deja perplejo a Winterbourne por lo inusual de estar hablando a solas y en público con una mujer a la que no parece importarle lo más mínimo las formas sociales establecidas mostrando una naturalidad e inocente desenfado que no sabe cómo calificar. Más tarde volverán a encontrarse en Roma; pero en esta ciudad el modo desenfadado y de libertad de costumbres con los que la joven trata a los caballeros no es aceptado por la comunidad americana allí establecida. Winterbourne, desconcertado y sin saber dar razón de ese comportamiento, se verá en la obligación de advertir a Daisy de su errónea manera de conducirse.
La novela fue escrita en 1878 y, pese a su brevedad, se expone la idea recurrente del autor en algunas de sus obras de mostrar las notables diferencias entre los turistas americanos, casi todos nuevos ricos, y la sociedad europea de costumbres establecidas y clase social arraigada a las que se han adaptado sin dificultad los pertenecientes a la alta sociedad americana. La joven, en realidad inocente, resultará víctima de unos prejuicios que no sobrevivirán en el nuevo siglo.
Daisy Miller, una novela corta escrita con un prosa de gran belleza os hará pasar un rato muy agradable. Espero que os guste.
Páginas: 94
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