viernes, 4 de diciembre de 2015

Una temporada para silbar (Ivan Doig)


Ivan Doig, autor estadounidense, falleció en abril de este mismo año 2015. Nacido en Montana, muchas de sus novelas están ambientadas en ese lugar.  Narrador del Oeste americano, familias de inmigrantes, maestros de escuela, mineros, cazadores de pieles, constructores, etc., serán muchos de los protagonistas de sus obras; hombres que luchan en una tierra inhóspita con una voluntad férrea.

En 1909, Oliver Milliron, un viudo con tres hijos y poca maña en las tareas domésticas, lee un anuncio en el que Rose Llewellyn se ofrece como ama de llaves. "No cocina, pero tampoco muerde" es lo que reza el anuncio, y añade: "viuda de buenas costumbres y disposición excepcional". Inmediatamente llama la atención de Oliver quien la contrata para poner orden en su casa de Marias Coulee, en Montana. Pero Rose no llega sola a la casa, viene acompañada de su hermano Morris, un perfecto dandi que ocupará el puesto de la maestra local cuando ésta se escapa con el predicador. Los particulares métodos de enseñanza del joven dejarán huella en los muchachos que acuden a la escuela. De hecho, el pueblo y sus habitantes no volverán a ser los mismos tras su trato con Rose y Morris. Las aventuras en el colegio, las amistades y el trabajo en el campo, todo al aire libre y en un bello entorno, dan consistencia al relato. Todo parece perfecto, incluso ciertas dosis de romanticismo entre Rose y Oliver hacen pensar en una situación placentera y un final feliz. Sin embargo, precisamente ese inusitado estado de perfección será lo que atraiga la sospecha.

Una temporada para silbar es sin duda una de las mejores novelas de Ivan Doig. Su particular manera de entender la vida y la imponente naturaleza de Montana quedan reflejadas a lo largo de la historia.

La voz del narrador en primera persona, muy atenta a los detalles, a veces se torna reflexiva con matices de introspección y exhibe una prosa lineal, elegante y cuidada y unos personajes magníficamente retratados, con gran riqueza de registros. Los diálogos son creíbles, salpicados de humor y de una ligera ironía.

Aún con ciertas dosis de intriga, la trama se desarrolla con sencillez. Aborda temas interesantes en un tono muy positivo, como la educación, la importancia de los lazos familiares o el valor del trabajo.

Estoy segura que os sentiréis atrapados por la historia y leeréis la novela con agrado.

Páginas: 349




2 comentarios:

  1. Me gustaría añadir al comentario de Encarna, la palabra ternura, sentimiento que vives a medida que avanza la lectura de este libro

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  2. Hola Pep, muchísimas gracias por tu comentario. Estoy completamente de acuerdo. Saludos

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