viernes, 31 de mayo de 2019

Viento del este, viento del oeste (Pearl S. Buck)

Viento del este, viento del oeste podría decirse que es un clásico dentro de los best seller. Escrito por la novelista estadounidense Pearl S. Buck en 1930 y con la que comenzaría su carrera literaria, se sitúa en el punto justo entre las civilizaciones oriental y occidental. Ella misma que, hija de padres misioneros, nació en la ciudad china de Hillsboro en 1892, siempre mostró fascinación por una cultura en la que se sintió inmersa sin olvidar sus orígenes occidentales.
En 1938 recibiría el Premio Nobel de Literatura.

En otra entrada de este blog os recomendé La perla de China, libro en el que la autora Anchee Min novela la vida de Pearl S. Buck.

Kwein-Lan pertenece a una familia tradicional y distinguida de China y toda su vida ha estado dirigida a prepararse para casarse con su prometido y servirle fielmente. Cuando llega el momento de la boda la joven está preparada y dispuesta a mostrar sus habilidades en las costumbres orientales. Sin embargo, su esposo, que ha sido educado y formado en América, no le da la misma importancia a esas costumbres que se le presentan ancestrales y completamente superadas. Como esposa tendrá que conocer a personas occidentales del ámbito de su marido que no dejan de sorprenderla por sus aspectos ridículos de piel blanca y modos liberales. Aún con todo, la paciente actitud de su esposo hace que la relación entre ellos vaya saliendo adelante. Pero el mundo de Kwein-Lan da un giro mucho más radical cuando su propio hermano, que también ha pasado una temporada en América, vuelve con una mujer occidental a la que ama y con la que va a casarse.

Pearl S, Buck traza un retrato certero de una familia china apegada a tradiciones antiquísimas cuando entra en conflicto con una nueva generación más abierta y occidentalizada, mostrando las desavenencias que, de manera inevitable, surgen entre padres e hijos cuando las nuevas ideas penetran en los baluartes de la cultura china.

La novela resulta magnífica donde el interés de la temática que desarrolla la autora se une al interés por unos personajes muy bien elaborados.

Espero que disfrutéis con su lectura.

Páginas: 256




martes, 14 de mayo de 2019

Fresas silvestres (Angela Thirkell)




La editorial Gatopardo ha tenido el acierto de rescatar a varias escritoras británicas de la primera mitad del siglo pasado cuyo ingenio es digno de tener en cuenta. Alma cándida, de Elizabeth Taylor, es una de ellas, y que ya os recomendé en otra entrada.

Ahora os animo con Fresas silvestres, de Angela Thirkell,  publicada por Gatopardo hace apenas dos semanas. Esta autora nació en Londres en 1890 en el seno de una familia ilustrada de la que formaban parte políticos, escritores y artistas de renombre. Desde que inició su carrera como escritora a principios de los años treinta del siglo XX y hasta su fallecimiento en 1961 escribió una novela al año. Fresas silvestres, escrita en 1934, está considerada una de las mejores de su extensa producción literaria, y que yo sepa, la única traducida al castellano. 

Lady Emily es una excéntrica aristócrata cuya generosidad y sentido del deber raya la exageración haciendo y deshaciendo cuanto cree que está bajo su responsabilidad. Junto a su esposo, el acomodaticio señor Leslie, habita una lujosa casa de peculiar construcción en una hermosa finca en Rushwater. Próxima ya la época vacacional están con el matrimonio su hija Agnes con sus tres hijos pequeños, su nieto mayor y heredero Martin, y sus hijos John y David. A ellos no tarda en unirse Mary, una joven encantadora, sobrina del esposo de Agnes, a la que han invitado a pasar el verano. Pronto quedará la joven prendada de la simpatía y la apostura de David Leslie, un seductor egoísta y superficial sin ningún interés por comprometerse con una relación seria. Sin embargo, no es en él en quien se fija Agnes para concertar un emparejamiento para Mary. La oportunidad para que la muchacha tome posición ante su futuro quizá podría darse durante el baile para la fiesta de cumpleaños de Martin. 

Angela Thirkell utiliza un agudo sentido del humor y de lo cómico al poner en escena a sus personajes. En una época de entreguerras en la que se cuestionan los parámetros sociales tradicionales, la autora consigue hacer una crítica audaz sobre los sentimientos de clase, los prejuicios y los modos a los que no está dispuesta a renunciar una aristocracia trasnochada. 

Apoyada en los clásicos, de los que se puede leer entre líneas su admiración por ellos, da vida a unos personajes capaces de los sentimientos más elevados junto a las acciones más elementales y prosaicas sin solución de continuidad.

Con gran ingenio, Thirkell logra escribir una historia simpática, inteligente y muy agradable de leer.

Páginas: 271


miércoles, 8 de mayo de 2019

La niña que miraba los trenes partir (Ruperto Long)

Hace unas semanas, al poco tiempo de publicarse en España este libro me propusieron leerlo. Poco atraída por un argumento ya conocido lo acepté más bien por compromiso, sin embargo, he de reconocer que la manera como el autor plantea la historia, utilizando el modo testimonial, captó mi atención desde el principio.

Ruperto Long, escritor uruguayo nacido en 1952, apoyado en hechos reales y tras una profunda investigación, escribe una novela conmovedora a través del testimonio de sus personajes, muchos de ellos reales, que apelan a la conciencia de nuevas generaciones.

Charlotte es una niña judía belga de ocho años nacida en Lieja. Cuando en el otoño de 1941 tiene que abandonar, casi con lo puesto, su hermosa casa junto a su familia huyendo de la invasión nazi y sus ideas xenófobas, comienza para ella y los suyos un peregrinaje que durará más de tres años en el que las privaciones y el miedo serán sus compañeros de viaje. Sólo la entereza y el amor de sus padres conseguirán paliar un poco la angustia que supone vivir en clandestinidad y con un futuro incierto cargado de peligros. Otras vidas transcurren al mismo tiempo por caminos diversos que el suyo, aunque condicionados por la misma guerra. Así, su tío Alter, un joven estudiante de ingeniería, leal, apuesto y de gran nobleza, se verá obligado a trabajar en uno de los guetos de Polonia donde se pondrá a prueba su firmeza moral. O Domingo López Delgado, un soldado uruguayo que siguiendo el dictado de su conciencia se alista como voluntario en las fuerzas de la Francia Libre llegando a combatir en el norte de África junto a Dimitri Amilakvari, el legendario militar francés de origen georgiano que daría la vida por sus legionarios en una lucha encarnizada contra los alemanes. 

Ruperto Long escribe un relato de gran sensibilidad en una época que solo cabe ser calificada de terrible consiguiendo sacar luz de la oscuridad apoyando su relato en las propias vivencias de unos personajes que, habiendo aprendido a prescindir de todo, no renuncian al amor, a la fe, a la libertad, a la Patria, a la lealtad y a todos aquellos valores capaces de sostener una vida a pesar de todo el mal que pueda intentar destruirla. 

Espero que os guste.

Páginas: 448


miércoles, 1 de mayo de 2019

Sucederá la flor (Jesús Montiel)

Sucederá la flor es una novelita breve, la segunda de Jesús Montiel, autor granadino nacido en 1984. 

Escrito con un estilo poético, íntimo, el libro, aunque breve, aborda una historia hermosa tras la que se oculta el desasosiego de un padre ante su niño enfermo. Ante lo inexplicable de la situación el protagonista-narrador hace observaciones precisas sobre la enfermedad y el cambio de perspectiva cuando se convierte en el eje alrededor del cual gira todo. 

Basado en su propia vida, el autor escribe el libro dos años después de que su hijo más pequeño fuera diagnosticado de leucemia y tuviera que pasar una larga temporada en el hospital luchando contra el más terrible de los enemigos. Dirigiéndose a su hijo, Jesús Montiel recrea con esta breve narración esos difíciles momentos utilizando imágenes muy vivas con las que logra trasmitir su estado de ánimo durante ese tiempo. 

Con un estilo reflexivo intenta buscar explicación, y sin encontrarla del todo, a la incongruencia que supone la enfermedad de un niño: “Un niño enfermo es un libro escrito por Dios con la tinta sagrada del sufrimiento en el dialecto de un amor que no se inquieta ni exige explicaciones”.

Aunque emotivo, el libro no se deja arrastrar por el sentimentalismo ni la ingenuidad. Siendo realista en su exposición, el autor utiliza un lenguaje poético para trasmitir su entusiasmo vital frente al dolor y el sentido de la trascendencia.

Páginas: 55